La flora ecuatoriana varía conforme a la diversidad de los
climas del país. Se observan biomas que van desde las sabanas xerófilas hasta
la selva pluvial. Panorama que encontramos desde algunos parajes semidesérticos
de la Costa hasta el ambiente ecuatorial húmedo del Oriente. A ellos hay que
sumar los contrastes derivados de la altitud, en la Sierra, hasta llegar a los
«pajonales» de los páramos y a la ausencia de vegetación en las cimas. Los
bosques cubren los flancos de la cordillera hasta los 2.000 m de altitud.
En la Sierra pueden señalarse los siguientes los siguientes pisos:
* Entre los 1.000 y 2.500 metros de altitud se encuentran catáceas y magueses, algunos tipos de algarrobos, luguerillas y una rica variedad de frutales.
* Entre los 2.500 y los
3.500 metros encontramos, trigo, cebada, papa y haba, memocos, quinoas, sigses,
magueses y catáceas.En la Sierra pueden señalarse los siguientes los siguientes pisos:
* Entre los 1.000 y 2.500 metros de altitud se encuentran catáceas y magueses, algunos tipos de algarrobos, luguerillas y una rica variedad de frutales.
* Entre los 3.500 y los 4.700 metros, aparecen los páramos de la cordillera, predominan los pajonales, y aparecen las gramas: chiquiraguas, frailejones, chocho del páramo, y gran variedad de valerianas y ortigas y el mortiño.
* A 5.000 metros de altura, aparece una malvácea.
* En las cimas, hasta los 5.600 metros de altitud, predominan los líquenes.
La región costera se caracteriza por la muralla de manglares, sobre todo en la zona meridional del país. Más hacia el interior la palma es la planta típica, con cuatro variedades: real, paja toquilla, tagua y chontaruro. Abundan los helechos arborescentes y los árboles de maderas finas como el laurel rosa, el cedro y la caoba. Otras plantas características, con aplicación industrial son la caña brava, el árbol del pan, el achiote, el palo balsa, el guarumo, la zarzaparrilla y las vainillas fina y ordinaria (Vainilla planifolia). Entre las gramíneas destacan el gamalote y el janeiro. Las planicies de la cuenca del Guayas son aún más fértiles, por estar expuestas a inundaciones, y se explotan para pastos, que sostienen la ganadería, el arroz, algodón, cacao, banano, etc. En la península de Santa Elena la escasez de las lluvias es causa de que aparezcan bosques de hoja caduca, y sabanas de yerbas durísimas.
En la región Oriental lo más sobresaliente es la heterogeneidad. En una hectárea de terreno no es raro distinguir hasta sesenta especies distintas de árboles, además de gran número de arbustos, lianas y plantas parásitas. La mayor parte del sector es una selva pluvial, no obstante esta región presenta algunos parajes secos y zonas pantanosas junto al curso de los ríos. Los árboles adquieren una talla de entre 30 y 50 metros y en muchas especies se dan alturas superiores a los 60 metros. Las especies más notables son la quina de Loja, el guambula, el alcanfor, el algodón silvestre, el ceibo, el caco blanco, el laurel, el barbasco, el bambú y el lechecaspi. Entre los árboles de maderas comerciales están, el cedro, la cruz caspi, el pucacaspi, la capitona, la tocota y el huama. También encontramos plantas narcóticas como la quina y la avahuasa; tintóreas como el huito, la pumaca y el yuyuncaspi; antiofídicas como la lisapopanga y el huaso; y plantas de aprovechamiento industrial como el estoraque, el copal, la sangre de grado, además de la quina, paja toquilla, caucho y alcanfor.
0 comentarios:
Publicar un comentario